Mi vida junto la Anorexia y la Bulimia.

140.
La autopista está vacía y yo tengo el control. No tengo miedo, me gusta la sensación, los arboles pasan en gran velocidad por mis ventanillas y se transforman en lineas en diferentes verdes mezclados con algunas luces creando un efecto simplemente sedante...
Ausente, aislado.
Karen me acompaña durante todo el viaje hacia el aeropuerto, su voz relajante a todo volumen me dice que todo irá bien y quiero confiar en ella.
Creo que todo me iría mucho mejor si siempre pudiera conducir sola con la autopista de mi vida, sin nadie que me estorbara y me obligara a conducir de otro modo, a veces incluso obligándome a detenerme.
Pero desdichamente uno no esta destinado a llevar el control total de su vida, y contradictoriamente confió en que debe a ver un buen motivo para que así sea.